Más de 170 estafados en toda España por la venta de sofás online suplantando a una empresa con sede en Gandia
La Guardia Civil de Oliva ha detenido a dos de los tres implicados en la estafa
Detenida por la Guardia Civil de Oliva en la Operación Galadrian / Guardia Civil Oliva
Gandia
La Guardia Civil ha detenido a tres personas, un hombre y dos mujeres, pertenecientes a un grupo criminal que se hacían pasar por empleados de una falsa tienda de sofás online con supuesta sede en Gandia. Los arrestados, de nacionalidad española, se hacían pasar por una empresa de fabricación y venta de sofás en Internet y se les atribuye una estafa de 543.000 euros. Los investigadores han localizado ya a 175 perjudicados en 21 provincias españolas, aunque se estima que este número aumente.
La operación se inició a finales del año pasado tras una denuncia de un afectado en San Juan de Alicante quien afirmaba haber comprado un sofá de 2.100 euros, pero que no había recibido el producto ni la empresa le había devuelto el dinero. Los investigadores comprobaron que había más denuncias con hechos similares en toda España y fue entonces cuando averiguaron que la empresa ficticia tenía la sede en la capital de la Safor. Los agentes localizaron las instalaciones de la tienda que se encontraban abandonadas y que la mercantil asociada no tenía actividad en la actualidad, sin embargo, había existido en el pasado.
La empresa estaba constituida en 2011 y había tenido actividad normal hasta el mes de abril de 2021, momento en que el negocio empezó a ir mal, pero captaban a sus potenciales víctimas aprovechándose de la confianza adquirida en sus años de trayectoria. La Guardia Civil calcula que llevarían cometiendo la estafa desde hace aproximadamente un año, tras una etapa en la que el negocio legal comenzó a acumular deudas con sus proveedores.
Las detenciones se han producido en las provincias de Asturias y Valencia, concretamente dos han sido llevadas a cabo por la Guardia Civil de Oliva. A los arrestados se les imputan los delitos de estafa, alzamiento de bienes, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal. Además, se han realizado dos registros en dos naves industriales situadas en Almoines y Riola en las que los autores ocultaban 120 sofás, propiedad de los proveedores estafados por el grupo.
El reparto de funciones entre los miembros del grupo era de importancia equitativa y estaba claramente distribuido. El hombre, de 44 años era el administrador de la empresa y se encargaba de las relaciones y contratos con los proveedores. Su madre, una mujer de 62 años, era la apoderada y llevaba la contabilidad. La tercera detenida, una mujer de 45 años, era la comercial y gestionaba para los clientes los contratos de las financiaciones de los sofás cuando éstos decidían pagar en esa modalidad. Los tres habían trabajado juntos en el pasado y para dar salida al capital estafado, invertían los beneficios obtenidos con la actividad ilícita en países extranjeros.
