El Ayuntamiento resiste el envite de la factura de luz y gas

Valladolid

La actual escalada de precios de carburantes, electricidad y gas hace pensar en un incremento en la factura energética del Ayuntamiento de Valladolid, dada la cantidad de sedes e inmuebles que depende del consistorio. Sin embargo, el alza del coste no es tan pronunciado como cabría esperar, entre otras cosas porque el Ayuntamiento cierra contratos, en el caso de la luz, a varios años y con el coste máximo cerrado.

En este caso podría incluso bajar el coste dado que se ha invertido en eficiencia, con la instalación de luces led, por ejemplo, que consumen menos. Pedro Herrero, el concejal de Planificación y Recursos, explica que "centralizar el contrato a un precio máximo cerrado en un momento en el que el mercado estaba más bajo que ahora, nos garantiza que como máximo vamos a gastare 1.5 millones de euros menos que hace dos años".

En el caso del gas hay disparidad de previsiones: las escuelas y colegios de la capital prevén una subida media del 30% del coste, aunque Aquavall, por ejemplo, no prevé más que un 1% de incremento. Este, de hecho, es uno de los suministros más sensibles a la inestabilidad del mercado, por lo que las previsiones hay que tomarlas con mucha precaución, advierten.

En todo caso, desde el consistorio vallisoletano, garantizan que no repercutirán las subidas a la ciudadanía: "Dentro de esta incertidumbre hay dos certezas, la primera es que hay previsión presupuestaria para afrontar el peor escenario posible y en segundo lugar, el Ayuntamiento no repercutirá a los ciudadanos ese aumento de gastos municipales, ni en tasas ni tarifas ni precios públicos".