Carburantes: rebaja fiscal
La espiral alcista de precios que la guerra en Ucrania está causando en los mercados de petróleo y gas, y por tanto, en los carburantes y la factura de la luz, está llevando a consumidores y empresas a hacer frente a una pérdida de poder adquisitivo que amenaza con prolongarse en el tiempo. Para frenar esta situación, el Ejecutivo prepara un plan de medidas que frene el impacto. Lo analizamos con José María Mollinedo, de Gestha, y Juan José Gil, de Fenadismer.
Madrid
Los precios de muchas materias primas se han disparado desde que, hace casi tres semanas, comenzaran los ataques rusos sobre Ucrania. Una situación que, más allá de incidir sobre sectores productivos concretos, está teniendo un elevado impacto sobre la economía en general, principalmente a través de los precios del petróleo y del gas, que devienen en último término en un encarecimiento de los combustibles y de la factura de la luz.
En este último caso, el megavatio hora en el mercado mayorista costará este martes, de media 249,66 euros, pero en la última semana ha llegado a dispararse hasta superar los 544 euros. De hecho, pero la media de marzo se sitúa ya en los en 336 euros, casi cien euros más de la media que el megavatio hora marcó en el mes más caro hasta ahora, el de diciembre. En el caso de los carburantes, que sería el que trata de atajar el Ejecutivo, el litro de gasolina de 95 se sitúa, de media, en Península y Baleares en 1,87 euros, por lo que llenar un deposito de 50 litros cuesta 28 euros más que hace un año, y 13 más desde el ataque a Ucrania; por su parte, el gasóleo cuesta ya 1,85 euros: ha subido 36 céntimos desde que comenzó el conflicto y, llenar un depósito de 50 litros cuesta 33 euros más de media que hace un año.
Y precisamente la carestía de los combustibles es lo que ha llevado a la convocatoria de un paro patronal por la Plataforma para la Defensa del sector del Transporte que ha comenzado este mismo lunes. Las principales patronales del sector se mantienen al margen de esta movilización. CETM ha difundido una nota en la que afirma que "los gravísimos problemas que tiene el transporte no se solucionan con un paro, sino con la aplicación y desarrollo de los acuerdos alcanzados con el Ministerio de Transportes". Por su parte, desde Fenadismer, su Secretario General, Juan José Gil reconoce en Hora 25 de los Negocios que el precio del combustible les está afectando negativamente. Respecto a una eventual rebaja en el precio de los carburantes, concretamente del impuesto de hidrocarburos, Gil señala que "todo va a depender de en qué consista esa rebaja: hemos tenido alzas bastante importantes en los últimos dos meses. En la última semana, sin ir más lejos, casi ha subido 30 céntimos el precio final del producto y, lógicamente, o se adoptan medidas que contengan está volatilidad que además estamos sufriendo en estas últimas semanas del precio del carburante, o si no, lógicamente va a hacer imposible que podamos seguir prestando nuestra actividad".
Para paliar la repercusión que esta subida desbocada de los precios de la energía está teniendo tanto en la industria como en la sociedad general, el Ejecutivo está preparando un paquete de medidas que presentará coincidiendo con el Consejo Europeo -que se celebra los próximos 25 y 26 de marzo- y que, en palabras de la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, actuará sobre "los productos están más impactados por la inflación, por la subida de los precios, tenemos que revisar su fiscalidad", aunque no ha dado más detalles. Medidas en esta línea se han anunciado ya, por ejemplo, en Francia, donde el primer ministro, Jean Castex, anunció el sábado que el Gobierno aplicará un descuento de 15 céntimos por litro porque, según apuntó, el precio medio del gasóleo cuesta ya en Francia dos euros y es probable que la situación se alargue, razón por la cual también pedía a las petroleras que asuman parte de la subida del petróleo.
Según explica en Hora 25 de los Negocios el Secretario General del Sindicato de Técnicos de Hacienda (GESTHA), José María Mollinedo, la rebaja del IVA de los carburantes no podría ser inmediata. "A día de hoy no se podría bajar. Si hay un acuerdo de la Comisión Europea y del Consejo de la Unión Europea en este sentido y se autoriza, es una medida transitoria o una medida excepcional, como ocurrió con las mascarillas de uso quirúrgico" apunta Mollinedo, quien reconoce que tampoco la rebaja del impuesto de hidrocarburos beneficiaría a los transportistas, pero apunta que "sí que es posible dar una ayuda directa -como ocurre en el caso francés- lo que nosotros entendemos es que este tipo de ayudas directas no deberían abonarse a toda la población".