66-64. Basket Sant Antoni roza la gesta en la final de la Copa LEB
El equipo ibicenco ha dominado con claridad los dos primeros cuartos pero Teknei reaccionó tras el descanso y supo jugar los minutos finales.
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Una imagen del partido / Cadena SER
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Ibiza
Basket Sant Antoni se ha quedado muy cerca de lograr un triunfo histórico en la final de la Copa LEB Plata. Ha luchado hasta el último suspiro en el pabellón de Amorebieta en Bilbao con todo en contra, un gran rival, que se entonó tras el descanso, las gradas apoyando a los suyos y una pareja arbitral que no pitó de la misma forma en las dos zonas en la fase decisiva del encuentro. A pesar de tantos obstáculos Sant Antoni, fue muy superior durante dos cuartos y acabó cediendo por una mínima renta, pero se mostró ante todo el planeta Basket como un equipo serio, con hechuras y con un derroche de garra encomiable. A veces hay derrotas que te hacen crecer y te demuestran que vas por el camino correcto.
La primera parte de la final ha tenido un claro color ibicenco. La defensa ha sido clave en el despegue de los de Carlos Flores desde el inicio, obligando al equipo vasco a hacer lanzamientos forzados o recuperando balones. Bilalovic tiraba del carro en ataque con la ayuda de Haro y aunque en los lanzamientos triples seguían los problemas de las últimas semanas, Sant Antoni cerró el primer parcial por delante, 10-17.
La renta creció todavía más en el segundo cuarto y en un visto y no visto los ibicencos se iban con una ventaja de 14 puntos para regocijo del centenar de aficionados ibicencos que no se quisieron perder esa cita histórica y que se se hicieron notar y se lo pasaron en grande durante todo el encuentro. Y es que el resultado importa, pero por encima de otra cosa estaban viviendo en directo una fiesta impensable hace unos años para el deporte de la canasta en Ibiza.
La defensa de los de Flores seguía siendo impenetrable, constantes ayudas, cerrando el rebote y los jugadores de Teknei Zornotza no atinaban ni con los tiros libres. Skuja dirigía bien a los de la Villa de Portmany que no aumentaban más su ventaja por algún tiro de tres precipitado, pero que siempre mantenían el colchón de seguridad por encima de los dos dígitos. No hacían falta los puntos de Grimau que no estaba acertaba en ataque, pero que ayuda mucho en tareas defensivas. Los vascos recortaron con un triple en su último lanzamiento antes del descanso con Sant Antoni en zona para dejar el marcador en 24-35.
El tercer cuarto empezó mucho peor para los de Flores. El conjunto vasco vio que la clave estaba atrás y apretó también en defensa firzando pérdidas y malos lanzamientos de sant Antoni, Zornotza podía correr por fin sin tener que atacar en estático y esto le permitió reducir enseguida la desventaja. a los de Flores les costaba atacar a y a los vascos les empezaron a entrar los tiros. Aunque Flores movió el banquillo y buscó alternativas las cañas se volvieron lanzas y como lo importante de las remontadas es ponerse por delante, el conjunto bilbaino cerraba el tercer parcial con una mínima ventaja 46-45 que dejaba las espadas en alto para el último parcial.
Pero Sant Antoni nunca se rinde y empezó con los dientes apretados el cuarto final y con un parcial de 0-4, tras una suspensión de Grimau se ponía de nuevo arriba y obligaba al técnico de Zornotza a pedir tiempo. La celebración del escolta catalán tras su canasta ilustraba la garra y la fe de los de la Villa de Portmany. Sin embargo Zornotza era otro equipo y con un triple tras la salida del tiempo muerto volvía a poner las tablas con ocho minutos por jugarse. Y en esa fase decisiva del choque con muchos contactos en las dos zonas la pareja arbitral no medía por el mismo rasero a los dos equipos y Zornotza volvía a ponerse por delante en el choque, incluida una técnica. A veces no se pueden mandar las naves a luchar contra los elementos. Pero todo estaba abierto a falta de cinco minutos,52-51, aunque a los ibicencos les costaba mucho jugar fluido en ataque, perdía balones ante una defensa al límite. Dos tiros libres de Slezas mantenían el choque en un puño, 54-53, pero un triple local en la siguiente acción mantenía la ventaja de Teknei, porque en la jugada siguiente la penetración de Grimau la escupió el aro. En un final apretado un mate espectacular de Harguindey, volvía de dejar el partido en un puño, 57-55 con menos de tres minutos. Los vascos seguían teniendo tiros libres para anotar y los colegiados no paraban de pitar faltas en la zona ibicenca. Cosas que pasan.
Con menos de 120 segundo por jugador el equipo bilbaino tenía una renta de 4 puntos, 61-57, que amplió con triple, su gran arma tras el descanso. Sant Antoni nunca tiró la toalla, 64-61, pero no pudo cerrar su rebote y concedió hasta tres intentos de tiro en el último minuto y acabó cometiendo falta. En los dos últimos cuartos si entraban los tiros libres a Zornotza que se puso con una ventaja de cinco puntos que ya no pudo superar el equipo de la Villa de Portmany que hizo un esfuerzo titánico y admirable pero que cayó en la orilla y estuvo a punto de voltear el marcador. En las finales solo gana un equipo, pero Sant Antoni también mereció subir a lo más alto.