Temor e incertidumbre entre los inversores rusos en la Costa Blanca

Los inversores rusos en la provincia de Alicante ya sufren las consecuencias de la guerra en sus operaciones como consecuencia de la actuación de la comunidad internacional y las sanciones económicas impuestas a Rusia por iniciar la guerra con Ucrania. "Tienen miedo ante la incertidumbre", dice el letrado Oleksander Predytkevych que trabaja con ciudadanos ucranianos y rusos en varias provincias españolas. Muchos de estos negocios se realizan en la provincia de Alicante, y especialmente en la Costa Blanca, donde la comunidad rusa es una de las más importantes del país con 17.000 ciudadanos censados.

Predytkevych, de origen ucraniano con 22 años de residencia en España, es administrador único de una firma de abogados que se dedica a gestionar estos negocios a compatriotas, pero también a inversores rusos. "Sanciones, restricciones, un rublo por la nubes y bloqueos de cuentas" es lo más temen sus clientes, ha dicho en Hoy por Hoy Alicante, que además suman la "posible paralización de visados" para inversores rusos por parte de la Unión Europea.

El plan B que suponía invertir en la Costa Blanca ya "no es garantía" para mantener sus activos ahora que el sistema económico ruso "se está cayendo a pedazos", dice, por las sanciones internacionales. Un ejemplo claro es el de uno de sus clientes que se acostó con un millón de euros y al levantarse al día siguiente ya eran 800.000, recuerda.

Las medidas de presión sobre Rusia por parte de la comunidad internacional "están surtiendo efecto", mantiene este abogado con familia en Ucrania que "ha rechazado venir a España". Y aunque se muestra muy crítico con la invasión Rusia a su país de origen mantiene que tiene clientes rusos que le han llamado "con vergüenza, para pedirme perdón" y cree que la convivencia entre ciudadanos de ambas nacionalidades en general, y en la provincia en particular, no se verá especialmente afectada porque todos son "conscientes" de lo que está pasando.