¿Sabías por qué se produce? Esta es la historia detrás de la sorprendente cascada de fuego de California
Este efecto óptico se produce durante el atardecer entre mediados y finales de febrero
Madrid
La cascada de fuego de Yosemite ha vuelto un año más a California. Como viene siendo habitual por estas fechas, ya que es el único momento del año en el que se produce, cientos de personas han acudido al famoso parque natural de Estados Unidos para disfrutar de uno de los fenómenos más naturales más espectaculares que se pueden ver en la región. Una cascada de fuego, conocida como Horsetail por su parecido con una cola de caballo, que en realidad no es más que un efecto óptico que nos engaña para adentrarnos en una escena más propia de un paraje infernal.
Pese a que pueda parecer un río de lava que cae desde lo más alto de la montaña, la cascada de fuego es realmente una cascada normal y corriente cuyos colores se tornan rojizos como consecuencia de los rayos del sol. Sin embargo, la posición del sol respecto a la Tierra provoca que este fenómeno natural tan solo tenga lugar durante el atardecer de la segunda quincena de febrero, lo que convierte a febrero en mes idóneo para visitar este parque natural. No obstante, tal y como relata la guardabosques Ashley Mayer en declaraciones a la BBC, su presencia no está garantizada. Para que pueda producirse esta cascada se tienen que dar una serie de condiciones.
Las condiciones necesarias para que se produzca este fenómeno natural
Para que pueda producirse la famosa cascada de fuego de Yosemite se tienen que dar una serie de condiciones es necesario que caiga una cantidad sustancial de nieve durante el mes de febrero. Pero no solo eso. Según cuenta Ashley Mayer, se precisa de temperaturas cálidas que derritan la nieve que alimentará posteriormente la cascada de 480 metros de alto.
Por último, la guardabosques afirma que es importante esperar a la posición exacta del sol, que proyecta sus rayos contra la cascada durante el atardecer, para poder disfrutar de este fenómeno en todo su esplendor. Todo ello para presenciar cómo una simple cascada se tiñe de colores anaranjados para crear la famosa cascada de fuego.
Cuando el fuego y el hielo se juntan
En caso de que se cumplan estos tres factores podremos disfrutar de la cascada en todo su esplendor. Un escenario perfecto para los fotógrafos y las fotógrafas de todo el mundo, quienes visitan el parque con el objetivo de sacar la imagen ideal. Quienes han decidido visitar el parque natural este año se han encontrado con una sorpresa. Y es que, tal y como demuestran las imágenes, la cascada de fuego fluye por una pared vertical de 900 metros completamente nevada.
De esta manera, la naturaleza nos muestra el fuego y el hielo bailando al unísono como si de una novela de George R. R. Martin se tratara. Sin embargo, hay que recordar que la catarata de fuego es un efecto óptico y que lo que parece lava no es más que una cascada de agua que se tiñe de tonos rojizos y anaranjados gracias a la luz que le llega desde el Sol.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología que aborda la vida digital desde otro punto...