"No saldría contigo ni aunque fueras la última Coca-Cola del desierto": la desastrosa cita de 'First Dates' en la que todo salió mal

Madrid

El equipo de First Dates no siempre da en el clavo. A pesar de que ha ayudado a forjar cientos de parejas desde abril de 2016, cuando el restaurante dirigido por Carlos Sobera abría por primera vez sus puertas, las citas que se producen dentro del programa no siempre acaban del todo bien. Y si no, que se lo pregunten a Katherine y Jorge, quienes han protagonizado este lunes una de las citas más desastrosas desde que se estrenara el formato hace algo más de cinco años. Una cita que comenzaba mal y que terminaba todavía peor dado que no llegaron a un entendimiento.

El primero en entrar al restaurante de Carlos Sobera era Jorge, quien llegaba al programa de citas con el objetivo de encontrar a la mujer de su vida. Después de hablar un poco sobre sus aficiones y sobre el tipo de persona que estaba buscando, el presentador vasco daba paso a Katherine. A pesar de que ambos se saludaron con dos besos, Katherine criticó detrás de las cámaras que su pareja no se hubiese levantado del taburete para saludarla: "No se puso de pie. No es porque yo sea la reina, pero es un símbolo de respeto".

"Yo voy elegante y él con una camisa de jean"

Pero no solo eso. La colombiana también criticaba que su pareja no se hubiese preparado para la cita: "Yo voy elegante y él con una camisa de jean". A pesar de ello, Katherine siguió adelante con la misma para ver si tenían algo en común. Pero no, no lo tenían. Después de que ambos hablaran acerca de sus aficiones, Jorge le explicaba que le gustaba viajar. También Katherine, quien aseguraba que ha visitado un gran número de países a lo largo de su vida y que le gustaría seguir haciéndolo. Mientras tanto, Jorge reconocía que lo que a él le fascinaba era la isla de Fuerteventura: "Es donde encuentro la paz".

Allí reconoce que le encanta practicar surf, algo que de primeras le ha gustado a Katherine. Sin embargo, y después de que Jorge le explicara que tampoco le dedica demasiado tiempo, la colombiana ha asumido que no es un surfero de verdad. Con el objetivo de descubrir más cosas en común, Katherine le ha preguntado si tiene moto. A pesar de que Jorge le explicara que sí, que tiene una clásica, la comensal reconocía que tampoco es algo que le entusiasme demasiado. En resumidas cuentas, nada salía según lo esperado.

Los gustos sexuales de Jorge espantan a Katherine

A la hora de hablar sobre sus gustos sexuales, Katherine reconocía que le daban morbo los tatuajes. Mientras tanto, Jorge explicaba que le encantaban los calcetines: "Me gustan de colores, con ovejitas, con vaquitas, me ponen todos los que no sean blancos o negros". Algo que sorprendía a su cita, quien reconocía que en ese preciso instante perdía cualquier posible interés hacia su pareja. Y es que, mientras ella explicaba que le daba morbo no llevar ropa interior debajo del vestido, su cita le explicaba que le gustaban los calcetines con forma para los dedos.

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Por último, y para terminar de enterrar cualquier posibilidad de tener una segunda cita, Jorge le explicaba a su pareja que quería formar una familia, tener hijos y que le gustaría vivir toda la vida en Zamora porque Madrid le parece demasiado grande. Mientras tanto, la colombiana aseguraba que no quería ser madre y que, de tener hijos, serian adoptados. Algo que no le gustaba a Jorge, quien explicaría en la decisión final que no quería una segunda cita por ese mismo motivo. Mientras tanto, Katherine era más dura con él y le explicaba que no saldría con él ni aunque fuera la última Coca-Cola en el desierto. De esta manera, cada uno se fue por su sitio de la misma manera que llegaron.