David Martín de los Santos director de La vida era eso en Gijón

Gijón

Dos mujeres españolas de distintas generaciones coinciden en la habitación de un hospital en Bélgica. María (Petra Martínez) vive allí desde hace décadas tras emigrar en su juventud, y Verónica (Anna Castillo) es una joven recién llegada en busca de las oportunidades que nunca encontró en España. Entre ellas se forja una peculiar amistad que llevará a María a emprender un viaje de vuelta al sur de España con una insólita misión. Lo que comienza como un viaje en busca de las raíces de Verónica, se convertirá en una oportunidad para cuestionarse ciertos principios en los que basó su vida.

"Aspiro a que la película se emancipe"

"Tenía muchos prejuicios con los encuentros con el público" confiesa el guionista y canalizador de historias como le gusta más definirse más que como director "porque el trabajo lo hemos hecho entre muchas personas", "pero ahora me encanta" continúa y lo justifica David Martín de los Santos en que esos encuentros que han celebrado por todo el mundo sirven como una manera de recibir el feedback de los espectadores. "Aspiro a que la película se emancipe", "estamos siempre escuchando la película para que crezca sana, fuerte y se emancipe me encanta seguir descubriendo algo sobre ella, en los coloquios la ente de cuenta cosas que le han llegado más que preguntar y en algunos casos te sorprenden y descubren cosas que tú no veías, da mucho juego por la de ingredientes que tiene la película como para generar debate" explica ante los micrófonos de A vivir que son dos días Asturias.

El director explica cómo en este viaje que han hecho por todo el mundo y por tanto por culturas muy diferentes es curioso ver cómo llegan los temas de los que se habla, entre otras cosas "de la sexualidad de una persona mayor que está descubriendo de su erotismo, "que en un país como Egipto llegue al espectador y se nos premie está muy bien, esto ha ocurrido de la misma manera en Francia, Alemania y en todo el mundo" asegura.

"Petra me dijo que no". "Fíjate cómo empezamos y como acabó, corta y la vemos recogiendo el premio Feroz diciendo que se masturba 3 o 4 veces al día, qué bonito ¿no?" dice entre sonrisa el director que explica que desde el principio tenía muy claro que quería que fuera ella quien interpretara a la protagonista "quería que tuviese mucha verdad, alguien que transmita, yo soñaba con ella, este personaje necesitaba una energía inocente, infantil, incluso adolescente, por todo lo que le pasa, pensé en ella, lo que tenía clarísimo" explica, añadiendo que daba por hecho que le iba a decir que sí, "¡no lo dudaba, lo daba por hecho, era un bombón de personaje!", "a ella le encantó pero tenía preocupaciones, que también eran mías, como las escenas un poco tensas con cierto erotismo", a Petra Martínez le preocupaba cómo se iba a rodar, pero finalmente las matizaron para que se sintiera más cómoda, "yo insistí, nos vimos hubo química entre los dos y de ahí corta y se la ve recogiendo todos esos premios".

"No es que yo haya pasado del documental a la ficción, yo sueño desde muy joven con hacer películas"

David San Martín tiene en su currículum la realización de cuatro documentales Mañana no es otro día, En el hoyo, Llévame a otro sitio y 23 de mayo, entre los que suman un centenar de premios, por cierto que todo su trabajo puede en la plataforma Vimeo, también sus documentales: ¿Generación perdida? y Ni vivos ni muertos para el programa Documentos TV de la 2 de TVE, además de La isla durmiente.

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"Yo empiezo a hacer documentales porque es un formato que me gusta y una manera de dialogar con la realidad, es más accesible económicamente", explica el director que en su empeño por contar estas historias se produce a sí mismo, "yo aprendí desde muy joven a tener curiosidad con todo lo que me pasaba alrededor, cuestiones explica de las que luego le cuesta mucho desprenderse. "La vida era eso está llena de un montón de cosas de mi vida personal y esos trabajos documentales" explica como en ¿Generación perdida? que habla sobre la crisis económica y la emigración de los jóvenes, "me interesa el cine que sea una crónica de nuestro tiempo como espectador y cineasta cuenta.

Habla de muchos proyectos de futuro el cineasta y de algún proyecto de futuro para el que siguen buscando financiación aprovechando el éxito de su primer largo; "en eso estamos, en los Goya hemos estado pavoneándonos" tiene ya un guión escrito Un hombre y un puente, una posible miniserie y un libro que quiere adaptar, "estoy deseando tener tiempo par ponerme a trabajar.